Los perros pueden ser el mejor amigo del hombre, pero muchos amantes de los animales adoran tener gatos como mascotas debido al espíritu cálido pero independiente del animal. Hay pasos que puedes seguir para mantener saludable a tu mascota y evitar problemas o preocupaciones. Al utilizar una combinación de productos para el cuidado, la prevención y la salud de las mascotas, puede garantizar la compañía de tu gato durante muchos años.
Hay dos formas importantes en las que puedes mantener la salud y la felicidad de tu gato. La programación de chequeos veterinarios anuales le permite a un profesional brindar cuidados y atención especiales a tu gato. Esto le permite al veterinario mantenerse al día con las vacunas y los exámenes regulares que requieren los felinos. Prestar atención a cualquier cambio físico en tu mascota te dará una mejor idea de su salud. Invertir en algunos productos especializados y aprobados para la salud de las mascotas también puede marcar una diferencia significativa.
Realiza una evaluación general de tu gato cuando lo estés acariciando o sentado con él. Echa un vistazo rápido al animal desde la nariz hasta la cola. Es inteligente hacer esto de forma regular y en un horario establecido, tu mascota se acostumbrará y no olvidarás su chequeo diario. Avisa a tu veterinario si descubres alguna inquietud potencial. Comienza con la cabeza de tu gato. ¿Están sus ojos claros y alertas? ¿Son sus orejas rosadas y limpias? ¿Los oídos emiten un olor acre que parece anormal? ¿Han aparecido insectos como una formación espesa y oscura dentro de las orejas del gato? ¿Son sus encías rosadas y sus dientes sanos, limpios y fuertes? ¿El sarro reside a lo largo de la línea de las encías? ¿Tu gato ha desarrollado un aliento desagradable?
Siente e inspecciona suavemente el cuerpo de tu mascota en busca de llagas, bultos, hinchazón, golpes, rasguños, parásitos o irregularidades. Estate atento a la suciedad de pulgas, que es similar en apariencia a la pimienta negra y parece roja cuando se humedece. Revisa las patas, orejas y cola de tu gato.
No dudes en preguntarle a tu veterinario cualquier duda que puedas tener. No tengas miedo de verificar qué es y qué no es normal.
Cepillar a tu gato con regularidad lo mantiene limpio y ordenado. Los cepillos de goma eliminan las células muertas de la piel y el cabello suelto. Los peines que están especialmente diseñados para un gato ayudan a sacar las pulgas y los pequeños insectos de su pelo.
Es imperativo cortar las uñas de tu gato con regularidad. Cuando no se hace esto, las uñas de un gato pueden convertirse en las almohadillas de las patas, lo que puede provocar dolor e infección. Un veterinario estará encantado de mostrarte cómo cortar adecuadamente las uñas de un gato de una manera que no dañe al animal. Si bien muchas personas optan por que les corten las uñas a sus gatos, esta no es la única forma de eliminar el rascado. También puede ser muy doloroso para la mascota. Los felinos pueden ser entrenados para rascar solo en áreas designadas, como un poste bien diseñado.
Los dueños de gatos deben investigar lo más posible sobre el cuidado adecuado de los gatos. También deben tener al menos un libro o folleto sobre primeros auxilios de emergencia. Si te familiarizas con los procedimientos de emergencia, posiblemente podrías salvarle la vida a tu gato. No intentes tratar a tu gato con ningún medicamento, como aspirina, ibuprofeno o supedrina. Muchos medicamentos destinados a los seres humanos pueden ser venenosos para los gatos.