Los gatos siempre han sido criaturas enigmáticas que nos cautivan con su gracia e independencia. Sin embargo, su naturaleza misteriosa también ha dado lugar a innumerables supersticiones y folclore en culturas de todo el mundo. Desde lo venerado y sagrado hasta lo temido e incomprendido, nos adentramos en el fascinante reino de las supersticiones y el folclore felino de varios países.
Egipto: los gatos como guardianes divinos
En el antiguo Egipto, los gatos eran venerados y considerados animales sagrados. Los antiguos egipcios creían que los gatos poseían cualidades protectoras y estaban vinculados a la diosa Bastet, la diosa del hogar, la fertilidad y el parto. Matar a un gato, incluso accidentalmente, era un delito castigado con la muerte. Muchas familias tenían gatos como guardianes contra los malos espíritus y las plagas, creyendo que su presencia traía buena suerte.
Japón: El gato Maneki-neko que saluda
En el folclore japonés, el “Maneki-neko” o gato que saluda es común en tiendas y hogares. Se cree que esta figura de gato con la pata levantada trae buena suerte y fortuna a sus dueños. Dependiendo de la posición de la pata levantada, puede atraer riqueza, felicidad o amor. Mucha gente cree que el gesto de invitación del Maneki-neko da la bienvenida a la prosperidad y la positividad a sus vidas.
Escocia: El gato montés escocés: un presagio siniestro
En el folclore escocés, encontrarse con un gato salvaje, a menudo denominado “Tigre de las Tierras Altas”, se consideraba un mal presagio. Se creía que ver un gato salvaje, especialmente antes de un viaje, presagiaba desgracia o incluso la muerte. Algunos incluso pensaron que el grito de un gato montés era una siniestra advertencia de una muerte inminente. Desafortunadamente, esta superstición ha contribuido a la disminución de la población de gatos monteses escoceses.
Italia: el poder protector del ojo de gato
En Italia es común que la gente use joyas o amuletos con la piedra preciosa “occhio di gatto” u ojo de gato. Se cree que esta piedra tiene propiedades protectoras que alejan el mal y el “mal de ojo”. Se cree que usar un amuleto de ojo de gato trae buena suerte, protege contra la energía negativa y mejora la intuición y la percepción.
Reino Unido: El rompecabezas del gato negro
Los gatos negros se han asociado durante mucho tiempo con supersticiones, tanto buenas como malas, en varias culturas. En la Europa medieval, los gatos negros a menudo se asociaban con brujas y se los consideraba presagios de mala suerte. Sin embargo, en el Reino Unido se creía que cruzarse con un gato negro traía buena suerte, especialmente si ocurría durante una boda o un nuevo emprendimiento.
Rusia: el querido gato azul ruso
En Rusia, la raza de gato azul ruso ocupa un lugar especial en el corazón de muchas personas. Se cree que estos gatos traen buena suerte, felicidad y armonía a las familias. Los gatos azules rusos a menudo se regalan a novias y nuevas madres como símbolo de protección y amor. Se cree que poseen cualidades mágicas, como la capacidad de prever el peligro.
Turquía: El gato Van, un símbolo de suerte
El gato Van, originario de la región de Van en Turquía, se considera un símbolo de buena suerte y protección. Estos gatos son conocidos por su apariencia llamativa, con pelaje blanco y marcas coloridas en la cabeza y la cola. Se cree que tener un gato Van puede proteger su hogar de los espíritus malignos y traer prosperidad a su familia.
China: el gato que trae prosperidad
En la cultura china, el “Huo Fu Mao” o “gato de la suerte” es un talismán común que se encuentra a menudo en negocios y hogares. Se cree que esta figura de gato, con una pata agitada, atrae prosperidad, éxito y riqueza. Es costumbre colocar al gato de la suerte cerca de la entrada, procurando que reciba abundancia en el establecimiento.
Resumen
Los gatos han dejado su huella en culturas de todo el mundo, como queridos compañeros y como símbolos de superstición y folclore. Desde el antiguo Egipto hasta el Japón moderno, estas enigmáticas criaturas han desempeñado una variedad de roles, desde protectores sagrados hasta augurios de desgracia.
Independientemente de las creencias asociadas con ellos, los gatos continúan cautivándonos e inspirándonos con su naturaleza misteriosa e independiente, trascendiendo fronteras culturales y supersticiones.